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3 cosas que no tienes cuando dejas México y te vas a vivir a otro país

Vivir en el extranjero es genial. Es verdaderamente increíble experimentar otros contextos y otras culturas; conocer su comida, sus tradiciones, sus instantes. Y no siempre quiere decir que sea mejor que vivir en el país al que a uno lo vio nacer. Sin embargo, hay muchas ventajas que valen la pena la experiencia de salir del país y disfrutar otros aires, sobre todo cuando uno vive en países con altos conflictos sociales como lo es México. La idea de soñar y vivir fuera te hace buscar todo lo positivo de no vivir en México. Ahora bien, regresar a nuestra tierra bella, no tiene que ser mala. De hecho, puede ser muy bueno el regresar. Aquí te dejamos 3 cosas que se extrañan verdaderamente al vivir fuera, y que no tiene precio al regresar a este paisito tropical que queremos tanto.

1. La familia cada domingo: hay muchas culturas similares a la nuestra, de hecho casi toda Latinoamérica, y poco a poco Estados Unidos bajo toda la influencia latina de allá. Y la familia es uno de los componentes más importantes para nosotros. Por ello, si vives fuera del país, el domingo es el único día que cambiarías todo por estar en Mexico, por mucho. Las comidas familiares, ir a desayunar con la mamá o con la abuelita, ir al cine con los hermanos, pasear por la ciudad con las tías, recibir en casa a la familia para una comilona, etc., todo esto hace que el domingo lejos de tu familia se haga más dificil. Si llevas un año fuera, no sentirás tan duro el shock. Si llevas más de 5 años, esos domingos se hacen difíciles.

2. Los chilaquiles para la famosísima y reconocida resaca. De acuerdo, cada país tiene sus tradiciones para curar el hangover, el katter, il mal di testa, la cruda o el guayabo pero los chilquiles verdes con mucho queso y picosos como el mismo infierno, son irrefutables. Su éxito es tanto que no dudo que haya gente que se eche sus tequilas el sábado por la noche solo con la intencion de que sus chilaquiles de domingo, sepan mejor. Tristemente, estos chilaquiles, los buenos, solo existen aquí en México. Claro que se pueden cocinar desde otro país pero nunca nunca nunca nunca sabrán igual.

3. El sol. ¿Qué pasa cuando mezclas un país con mucha fiesta, muy alegre, muchas tradiciones familiares, y sol casi cada día del año? Pues sucede algo espectacular. Felicidad antidepresión causada por tardes grises y lluviosas. En domingo es mucho mucho mucho mejor cuando hay sol para disfrutar salir a la calle, tomar café en una terraza, ir a Teotihuacán, a Coyoacán o a San Ángel. El sol se extraña en tierras más frías del norte de Europa.