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5 características que necesitas para ser un emprendedor social | Ashoka

Las técnicas textiles de las comunidades indígenas originarias de México no solo son milenarias, sino que son consideradas, además, patrimonio cultural inmaterial por la UNESCO. Más que el valor de la prenda en sí misma, la labor de salvaguarda se concentra en que los artesanos y las artesanas sigan practicando la artesanía tradicional y que transmitan sus conocimientos a otras generaciones. Bordados oaxaqueños, mazatecos, chinantecos, mixes, mazahuas, tsotsiles y zapotecos, rebozos, huipiles, lienzos y faldas son hoy parte de nuestra identidad y herencia.  

 

Y aquí entra Carla Fernández, diseñadoracuyo proyecto consiste en viajar por todo el país para visitar comunidades de artesanos que se especializan en textiles con el objetivo de reservar y revitalizar este legado a través de su marca de alta costura. Carla y su equipo están cambiando las normas de la industria al fomentar prácticas de mercado justas y sostenibles para las comunidades indígenas y han capacitado a más de mil hombres y mujeres en este campo.  

 

Así como ella, se puede contar la historia de Miguel Duhalt, quien por medio de su proyecto Comunidad 4UNO ha logrado la inclusión financiera de más de 2.5 millones de trabajadoras del hogar. Podríamos mencionar también a Itzel Mayo, quien con su organización Grupo Murlota está creando un nuevo modelo de soberanía alimentaria que empodera al sector campesino por medio de la producción de huevo orgánico. Y Julio Álvarez, quien a través del programa Promesa ha logrado que las comunidades escolares se involucren en una cultura de sostenibilidad ambiental de largo plazo.  

 

Al igual que Carla, ellos y ellas han sido nombrados como Ashoka Fellows por sus contribuciones al emprendimiento social. Por medio de este programa, esta organización internacional apoya proyectos de emprendimiento social con soporte económico y profesional para que amplíen todavía más su capacidad transformadora y profundicen su impacto.  

 

¿Pero qué tienen en común proyectos tan diversos? A primera vista, puede que pertenezcan a ámbitos en apariencia muy diferentes: textiles, agricultura, finanzas, educación. Sin embargo, en el corazón de estas iniciativas radican cinco puntos en común que los hacen únicos y valiosos socialmente: los cinco criterios de selección que han hecho merecedores de ser Ashoka Fellows a estas y otras iniciativas desde hace 40 años.  

 

  1. Una idea nueva

Carla, Miguel, Itzel, Julio y otros emprendedores sociales han tenido la virtud de ofrecer una solución única ante un problema relevante. Mientras grandes cadenas de ropa eran acusadas de plagiar diseños de las comunidades indígenas, Carla ofrecía un canal para preservar y reconocer sus conocimientos. Mientras el gobierno apenas exploraba caminos para formalizar el trabajo del hogar, Comunidad 4UNO ya ofrecía herramientas para empoderar financieramente a miles de mujeres que realizan este tipo de trabajo. Los y las Ashoka Fellows se reconocen por generar cambios sistémicos y romper con los modelos establecidos.  

 

  1. Creatividad

Tomemos el ejemplo de Promesa, institucion que a través de cursos, jornadas y campañas no solo ha incidido en una gran cantidad de escuelas para que mejoren sus prácticas laborales y el manejo de residuos sólidos, por ejemplo, sino que ha logrado que grandes corporaciones como Google, Disney y Cinépolis repliquen su modelo. Los y las emprendedores Ashoka proponen aproximaciones diferentes a las oportunidades y a los problemas y crean nuevos roles para las personas y las instituciones.​

 

  1. Capacidad emprendedora

No cabe duda que la pandemia y el confinamiento nos han puesto frente a retos sociales y económicos que antes ni si quiera imaginábamos. Para Víctor Moctezuma, también Ashoka Fellow con su proyecto iLab para la democratización del conocimiento y habilidades tecnológicas, esta crisis es en realidad una oportunidad para operar de nuevas formas y resolver las causas de los problemas haciendo uso de los datos y la tecnología. Los candidatos a Ashoka Fellows destacan por su determinación, valentía y perseverancia.  

 

  1. Impacto social

Todos los emprendedores y las emprendedoras que se suman a la red Ashoka son líderes reconocidos en sus sectores, ya sea con jóvenes, mujeres, migración, ciencia y tecnología, entre otros Algo que distingue a estas iniciativas de emprendimiento social es que demuestran el potencial para generar alto impacto , y los datos están ahí para confirmarlo: cientos o miles de familias y comunidades cuyas vidas se han visto transformadas de manera positiva.    

 

  1. Fibra ética

Finalmente, para la selección final es fundamental que los emprendedores y las emprendedoras hayan demostrado a lo largo de su trayectoria un compromiso hacia los demás. Como Ashoka Fellows, Carla, Julio, Víctor, Julio e Itzel, al igual que los miles de miembros alrededor del mundo, han demostrado su vocación de anteponer los beneficios de la mayoría a los propios.   Está pronta a cerrarse una edición más de  la convocatoria Ashoka Fellows, este 18 de septiembre. Si conoces a alguna persona o una organización que cumpla con los cinco criterios para ser Empresario Social Ashoka, anímate a nominarla para que conozcamos su trabajo.  

 

Escrito por Arturo Vallejo, Ashoka Volunteer Editor and Writer

 

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