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Lo que se olvida de Tajamar

Hay muchas formas de entender el ecocidio de Tajamar. Hay muchos culpables y peor aún, hubo muchas víctimas. Pero todavía es pensar que toda la culpa fue de una parte o que todos estamos libres de culpa alguna. Quizá quien sí estés libres de culpa son los activistas que denuncias año tras año estas prácticas y se juegan la vida día con día batallando contra las grandes empresas, los gobiernos y los enormes intereses.

He escuchao una y otra vez a la gente de Fonatur que ellos realizaron los impactos ambientales correspondientes y que todos sus papeles estuvieron en regla. ¿Y qué decir si vemos, quienes estamos en este mundo, que los estudios de impacto ambiental de Semarnat son más bien una broma, pagados e inutiles, que permiten precisamente lo que sucede en Tajamar, en Santa Fe (former DF) y en cualquier esquina del país? A este problema le hemos hecho frente de nuestra consulora y aquí un ejemplo de la razón que teníamos. Sí, todo en regla pero toda regla està corrupta, es inútil y no se realiza como debería hacerse. Semarnat tiene gran culpa aquí.

Y Fonatur no se salva de nada. Reclaman que su impacto estaba medido y que todo se sabía desde hace 10 años. Que es un desarrollo de hace más de 40 años y que todo estaba acorde al plan. ¡Y qué arrogancia y qué poca inteligencia es usar este argumento como proteccion! Qué ignorante es decir que lo que sabíamos desde antes es igual de confiable de lo que sabemos ahora. Qué fácil se olvida que hasta hace menos de 20 años finalmente nos dimos cuenta que podíamos evitar el agujero de ozono, y
que en menos de 20 años (en realidad más de 40 años pero sin ser verdaderamente público) nos dimos cuenta que nosotros estamos causandi el cambio clímatico. Según Fonatur, lo que era válido hace 40 años y hace 10, seguirá siendo para la eternidad.