«Si despiertas temprano, entonces serás más exitoso», es una de las mentiras más grandes del mundo godín de México. Se cree que dependiendo de cuántas horas trabajas, lo que significa despertar a las 6am o antes para ir a la oficina, podrás subir de nivel laboral o ganar mejor salario. Curiosamente, esta creencia desprecia a los freelancers y a los emprendedores/empresarios, los cuales tienen horarios propios, no dictados por jefes godín nivel A2. Y por ello existe un concepto justificatorio de creer que si la otra persona no se levanta temprano, no es buena en lo que hace. Peor es creer que si se va temprano de la oficina, es porque no le interesa su trabajo.

El problema es que todo esto es una ilusión; un truco sucio de jefes irresponsables para exprimir al máximo a sus empleados, privándolos de cosas tan comunes como despertar a las 8am, salir de trabajar a las 5pm y poder disfrutar una noche de cine sin pensar: «ya me tengo que ir a dormir para no desvelarme mucho«. Y es un discurso justificatorio porque si el Godín lo hace y sufre, entonces debería haber algo como una justifica divina que no pase por alto dicha martirización o bien que no regale beneficios a todos aquellos que no sufren lo mismo.

Se dice comúnmente que los grandes genios de la humanidad son nocturnos. Sin embargo, muchas grandes genialidades también se han producido con trabajo diurno y vespertino. Las generalizaciones, tan odiosas en nuestro psique, están tan arraigadas que nos hacen pensar que el mundo es solamente como nosotros lo queremos ver. Tal vez nos falta un poco de humildad para evitar decir: «qué flojera levantarse tan temprano» y tener empatía por aquel madrugador, o «ni trabaja, mira a qué hora se levanta» o «solo trabaja un par de horas al día», para justificar la ineficacia laboral de uno mismo. Todos tenemos horarios. Todos tenemos rutinas. Ni la mía es mejor que todas ni la de otros es mejor que la mía. En una conferencia, el Dalai Lama dijo despertar todos los días a las 3am y dormir a las 8pm. Es, creo,  realmente dificil seguir su horario y tomarlo como una referencia. Sin embargo, en ningún momento es criticable su esfuerzo e impacto en el mundo.