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Y si no aprenden de sus errores…y va de nuevo: en tiempos de dinosaurios y crisis políticas

Uno piensa que en tiempos de crisis, uno aprende de los errores pasados. Uno pensaría que cuando las crisis se repiten, uno ya sabría qué hacer y qué no hacer. Uno pensaría que ha costado tanto el llegar hasta donde se está que la primera lección debería ser: aprendo de mis errores para no volver a cometerlos, y no volver a caer. Pero en el gobierno mexicano, con el Partido político que tenemos, al parecer esto llamado aprendizaje no es su fuerte, ni de lejos.

En épocas de dinosaurios, tal vez la analogía se extiende manera perfecta. Es cierto que los dinosaurios no se extinguieron por su culpa suya. ¡Qué dinosaurio iba a imaginar que le caería un meteorito cerca de lo que en tiempos modernos le llamarían Península de Yucatán, con lo cual acabaría la vida como antes de conoció! Ahora bien, el dinosaurio, sin contar con los brillantes velociraptor de las películas, es considerado tal vez no como el más inteligente ser que habitó la tierra. Y es precisamente al parecer esta idea la que es más adecuada y es aún vigente para el PRI.

Si al PRI le cayera un meteorito después de 70 años de existencia, puede o no ser su culpa. Pero que haya tenido la oportunidad de gobernar de nuevo, poca gente lo entendería. Sin embargo, lo que no hay forma de entender es su poca habilidad intelectual en el manejo de crisis, o más bien, su poca adaptación a los tiempos modernos para aprender de sus errores, de sus malos manejos, de sus conflictos con la población más joven de México. Sí, la población que lee las redes sociales, la que no ve la televisión sino internet, la que busca información en vez de esperar que le llegue ya digerida. A esta población, el dinosaurio se ve todavía más arcaico y más inútil. A ella se hace evidente la poca capacidad de aprendizaje del dinosaurio. Las crisis de ahora me hacen recordar a García Marquez: esto es la Crónica de una derrota electoral anunciada. Sí, comprarán votos, usarán toda su maquinaria corrupta y sí, tratarán de ganar por todos los medios posibles. Sin embargo, lo obvio es que el mundo ya no está hecho para ellos. Y eso, no se han dado cuenta. ¡Y qué bueno!