El Banco Palmas es la organización donde empieza todo. Este banco forma parte de un ecosistema de lucha por los derechos humanos como el primer banco comunitario del país. La idea surge para incluir financieramente a comunidades creando un modelo diferente que logre dinamizar la economía, el consumo y la producción local. Es por ello, que Banco Palmas apoya al Palmaslab, un laboratorio dedicado a la investigación e innovación en tecnología de información, en donde surge el PalMap. Con ella, es posible realizar toda la colecta de datos para conocer las necesidades de las comunidades de las periferia urbana, qué piensan, cómo viven sus retos día a día y muchas cosas más.

La PalMap es una herramienta que genera vía datos que permiten a agentes de transformación local (organización de la sociedad civil, movimientos sociales, empresas, residentes) movilizar comunidades con acciones  participativa que los empodera y mejora. La metodología de PalMap contrarresta la falta de información sobre estas comunidades con una red de jóvenes que de jóvenes que levantan información a través de la experiencia de las mismas comunidades para lograr catalizar soluciones para ellas y además, la falta de oportunidades para la juventud. A su vez, estos jóvenes junto con miembros del Colab/Massachusetts Institute of Technology (MIT) trabajan para crear un nuevo diagnóstico y diseñar un nuevo mapa de la pobreza/riqueza y de los deseos y perspectiva de la población de estas comunidades.  “Una de nuestras teorías de cambio es que uno de los motivos por los cuales muchas de las comunidades viven en pobreza es porque no existe información relevante en tiempo real sobre lo que pasa dentro de ellas”, afirma Asier Ansorena, Coordinador de Palmaslab. Con estas propuestas, Asier espera “no solo motivar soluciones locales, sino también ir sofisticando este proceso y poder incentivar cambios en la política pública”. Con PalMap, “proponemos que la comunidad se apropie de tecnologías de la información para que pueda defenderse, denunciar y pensar en soluciones propias”, declara Asier. Esta aplicación crea la posibilidad de mostrar con datos, indicadores e historias las violaciones a los derechos humanos más urgentes pero no tan evidentes y  las cosas que tienen que empezar a cambiar.

PalMap aún tiene camino por recorrer. Colab/MIT  y la Rede Conhecimiento Social serán socios claves en este trabajo de expansión a otros lugares de América Latina buscando ser una plataforma abierta y con mucho más soporte para alojar toda la información; prestando su conocimiento acumulado en investigación y análisis de datos para ir perfeccionando esta plataforma. Una herramienta tecnológica que construye futuro con mucho presente, que promueve el empoderamiento, la movilización, el desarrollo social a través del económico. La posibilidad de no vivir más en el anonimato, en las orillas del mundo, sino salir y encontrarse de frente con los propios derechos, lucharlos y transformarlos.

Escrito por Sofía Ortega

Editado para Resilientemagazine.com

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Este texto es una colaboración entre Ashoka y Resilientemagazine.com