Actualmente la electricidad es un servicio básico que permite el desarrollo económico y social de una persona, comunidad o país, prácticamente es indispensable para llevar a cabo gran parte de las actividades humanas del día a día (CESOP, 2018).

El contar con acceso a la electricidad es imprescindible para llevar una vida digna. México es un país en desarrollo que puede garantizar a gran parte de su población el contar con una fuente de acceso a la electricidad. En 2017 el 5.41% de la población no tenía acceso a la electricidad debido a factores como el aislamiento geográfico, el difícil acceso a las zonas marginadas y la dispersión de los habitantes en las comunidades más marginadas (Martínez, 2017; Suárez, 2016).

Estos son factores que han impedido un desarrollo equitativo en la sociedad mexicana, lo que amplía la brecha digital. A pesar de existir estas problemáticas de inequidad y marginación social, existe una que ha sido ignorada conforme pasan los años, esta es, la falta de ingreso para poder acceder a la electricidad, en pocas palabras, no existen cifras o estadísticas que evidencien el porcentaje de población que tienen la capacidad económica para acceder a este servicio. El tener acceso a la electricidad no significa que se pueda adquirir o pagar (Martínez, 2017).

Este problema afecta comúnmente a las personas de clase baja, las cuales en ocasiones recurren al robo clandestino de luz para su uso doméstico, de esta manera pueden deshacerse de un gasto que afecta su economía personal o familiar pero que sigue siendo un servicio básico para poder vivir.

En Abril de 2019 la Comisión Federal de Electricidad (CFE) dio a conocer la suma de usuarios legales que presentan un adeudo en su pago, dicha cantidad es aproximadamente el 20% de sus usuarios, lo que representa una cifra de 7 millones 266 mil 259 clientes.

La situación de poder adquisitivo no solamente afecta a la sociedad, sino también a organizaciones como CFE, que presentan un alza en sus pérdidas por falta de pagos; como resultado de lo anterior se han realizado cortes de luz a un millón 180 mil 117 clientes (Angel, 2019).

La situación económica del país no permite a la población más necesitada poder independizarse del servicio público de luz, además de que no existe por parte del gobierno apoyo alguno además de los subsidios, que se dan por un periodo establecido de tiempo y debido a las condiciones climáticas de un estado.

El acceso a la electricidad por medio de la adquisición económica es un tema del cual no existe mucha información, ya que en repetidas ocasiones las personas roban electricidad, pero INEGI u otras organizaciones no cuentan con un censo o estadísticas aproximadas del total de esta población, en pocas palabras, un individuo puede decir que si cuenta con electricidad más no que es mediante el robo de este servicio. Además, al no ser un tema que sea el foco de atención, ninguna empresa u organización no gubernamental ha ofrecido apoyo a este segmento de la población, ya sea con la implementación de energías limpias comunales o apoyo económico para el uso de este servicio.

Angel, A. (22 de 4 de 2019). /Animal político/. Obtenido de ¿Pagaste la luz? Una quinta parte de mexicanos le debe a CFE; Tabasco, el caso más grave:

CESOP. (2018). El acceso universal a la energía eléctrica. Datos y referencias para un análisis legislativo. CDMX, CDMX, México.  Martínez, P. (27 de marzo de 2017). Animal politico. Obtenido de Casi 7 millones de mexicanos viven en pueblos aislados, sin servicios básicos: Conapo: https://www.animalpolitico.com/2017/03/mexicanos-pueblos-aislados-conapo/

Suárez, W. (22 de junio de 2016). Semana sostenible. Obtenido de El reto de energizar zonas rurales aisladas:

https://sostenibilidad.semana.com/opinion/articulo/el-reto-de-energizar-zonas-rurales-aisladas/35443