El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) define a la discapacidad como la “limitación para realizar una actividad considerada “normal” para un ser humano, como consecuencia de una deficiencia física o mental. Se consideran cinco tipos de discapacidad: motriz, auditiva, visual, mental e intelectual”.

 

En México, el 6.4% de la población del país, mayores de 5 años, lo cual es representado por 7.7 millones de personas (INEGI, 2016), tienen al menos una discapacidad. De este porcentaje, la mayoría son personas adultas mayores (con 60 años o más), es decir, de cada 100 personas con discapacidad, 51 son mayores de 60 años.

 

Asimismo, ese año la discapacidad motriz fue el principal tipo de discapacidad en nuestro país, el cual se presenta en 2.6 millones de personas (37.32% de las personas con discapacidad).

 

¿Por qué las personas tienen una discapacidad motriz?

 

En México, padecer una enfermedad es la principal causa de las discapacidades, el 44.4% del total de las personas con discapacidad motriz reportan que padecer de una enfermedad común es la causa de su discapacidad (INEGI, 2000).

 

Sin embargo, son numerosas las causas identificadas como relevantes en cuanto a la discapacidad, de las cuales las que más se presentan en el país son: factores genéticos, enfermedades agudas o crónicas, violencia, sedentarismo, tabaquismo, accesibilidad a servicios de salud, complicaciones perinatales, traumatismos -intencionales o no-, adicciones al alcohol y a las drogas y problemas nutricionales.

 

Es importante mencionar que de acuerdo a la Organización Panamericana de la Salud (OPS) el riesgo y la presencia de la discapacidad y la minusvalía aumenta con la edad, por lo que es importante mantener un estilo de vida saludable durante la juventud para gozar de una vejez saludable.

 

¿Cómo se vive en Latinoamérica con una discapacidad motriz?

 

Por otro lado, en materia de pobreza, el Consejo Nacional para la Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval)⁴, en un estudio realizado en 2014, reportó que el 54.1% de las personas con discapacidad, se encontraban en condición de pobreza, cifra superior a la tasa de prevalencia de la pobreza a nivel nacional (46.2%).

 

Un estudio realizado en la ciudad de Santiago de Cali, Colombia⁷, que se desarrolló con el propósito de identificar las barreras del entorno en Latinoamérica que afectan la inclusión social de una población con discapacidad motriz, destaca estadísticas importantes que mencionar:

 

– El 29% de las personas con discapacidad motriz, requieren de un acompañante; de los cuales en el 75% de casos, el cuidador tiene algún parentesco con la persona con discapacidad, por lo que el 64% de acompañantes no realiza ninguna actividad laboral remunerada, y el 36% que lo hace recibe ingresos mensuales menores a un salario mínimo, lo cual afecta considerablemente a la economía del hogar.

 

– El 62% de las personas tiene limitaciones al desplazarse como pasajero en medios de transporte público, y a un 82% de las personas le gustaría mejorar su forma de desplazarse: dentro de la casa, en edificios públicos, privados, calles y parques, lo cual les permita participar en más actividades.

 

– El 83% de las personas se consideran limitados para realizar una actividad profesional, debido a la falta de accesibilidad del entorno. El 73% manifiesta dificultades para acceder al trabajo remunerado y el 74% a la educación superior.

 

– En México, el 54.1% de las personas con discapacidad, se encuentran en condición de pobreza, cifra superior a la tasa de prevalencia de la pobreza a nivel nacional (46.2%), lo cual aumenta las cifras antes mencionadas (CONEVAL).

 

¿Qué podemos hacer para promover la inclusión?

 

Es importante realizar iniciativas para la práctica de la arquitectura inclusiva, con el fin de que las personas con discapacidad motriz se puedan desplazar libremente por su vecindario, su escuela o trabajo, por el parque, plazas, mercados e inclusive en el transporte público. Brindarles el acceso para poder realizar sus actividades cotidianas no solamente les dará la oportunidad de vivir una vida plena y digna, así como de contribuir al desarrollo económico y social del país, con esto también estarán ejerciendo su derecho a circular libremente, el cual es considerado como un derecho humano (artículo 13 de la Declaración Universal de Derechos Humanos).

 

Asimismo, al ser las enfermedades comunes la razón más representativa de tener una discapacidad motriz, resultaría importante impulsar programas de educación y consejería que promuevan la actividad física, mejoren la nutrición o reduzcan el consumo de tabaco, alcohol o drogas, así como realizar mediciones gratuitas y accesibles de la presión arterial y del colesterol, así como pruebas de detección de enfermedades cáncer, diabetes o enfermedades cardiacas.

 

Finalmente, es importante resaltar la importancia de las organizaciones de la sociedad civil, ya que, de acuerdo al Centro Mexicano para la Filantropía (CEMEFI), son en buena medida, motor y artífice de los grandes cambios que México ha tenido. Actualmente operan muchas organizaciones en México que buscan empoderar e incluir a las personas con discapacidad motriz, las cuales ya cuentan con un modelo asistencial efectivo y completo. El apoyarlas, les permitirá a las organizaciones logra un mayor alcance, y por consiguiente un mayor impacto.

 

Si quieres conocer algunas de las organizaciones que apoyan a personas con discapacidad motriz, visita sus páginas web:

 

Hermanos en la Discapacidad A.C. http://www.hermanosenladiscapacidad.org/

Fundación para la Inclusión y Desarrollo de Personas con Discapacidad, A. C. https://findedis.org/

FHADI I.A.P. https://www.fhadi.org/

Vida Independiente México http://vidaindependientemexico.com/

 

Escrito por María José Kerlegand

Especialista en Responsabilidad Social Empresarial

 

 

 

 

 

 

Conoce más de lo que es posible hacer por el medio ambiente en terraetica.com