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¿De verdad queremos tomar acciones para cuidar el medio ambiente? | Ashoka

Debemos, dice la ciencia…podemos, dice la tecnología…pero ¿queremos? Quizás después de ver cómo afecta el cambio climático a la vida diaria, sí querrás. El 78% de los mexicanos les importa poco o nada la preservación del medio ambiente y no toman acciones preventivas para su cuidado. No es un lindo dato de la consultora Kantar para recordar en este Día de la Tierra, sin embargo, sí es importante de discutir las razones, cómo podemos bajar esta cifra y las acciones que le corresponden implementar a las empresas, al gobierno y a nosotros como sociedad.

 

Una de las razones por las que hay tanto desinterés en el medio ambiente es que todavía existe un importante desconocimiento de los efectos del cambio climático en la salud, en la economía, en los trabajos de las personas y el crecimiento a futuro de toda la sociedad, así como las soluciones que proponen la ciencia y la tecnología, dijo Natalia Lever, directora para México y Latinoamérica en The Climate Reality Project.

 

“Por eso en Climate Reality compartimos la verdad que hay detrás del cambio climático, si no hay más gente sabiendo la verdad, será menos probable que los políticos hagan algo al respecto. Hace mucha falta que más personas lo sepamos, lo hablemos con contundencia y conocimiento de causa y lo exijamos más. Mientras más informados estemos, veremos un movimiento climático más robusto”, dijo Lever durante la Cumbre de agentes de cambio por el planeta y el clima, organizado por Ashoka.

 

¿Cuáles son esos efectos negativos que desconocemos? Lever enlistó algunos que intervienen en la vida de todos los seres humanos de todo el mundo, sin importar lugar o clase social.  

 

  • Salud:

– Olas de calor que afectan principalmente a adultos mayores, personas con afectaciones cardíacas y a quienes trabajan al aire libre

– Propagación de enfermedades tropicales por mosquitos, como el Zika, ya que la temperatura alta les facilita vivir y reproducirse en más lugares

– Los últimos cinco años han sido los más calientes de la historia de la humanidad desde que se puede medir la temperatura del planeta.

 

  • Economía e infraestructura en las ciudades:

– Millones de personas que pierden sus propiedades e infraestructura afectada por tormentas y huracanes más violentos y extremos, provocados por el agua caliente (más del 90% del calor extra en la atmósfera va a los océanos).

– Inundaciones y afectaciones a la infraestructura provocadas por bombas de lluvia, que son torrentes de agua (tres veces más que el Río Misisipi) en pocos días, cuando debería caer en meses.

– Ciudades costeras, como Miami, inundadas por el aumento del nivel del mar provocado por el derretimiento de los glaciares

– Nadie escapa: desde Mumbai hasta Nueva York, todas las ciudades cerca del mar están en riesgo por el aumento del nivel del mar.

 

  • Agua y alimentos:

– Sequías prolongadas e intensas porque el aumento de temperatura saca agua del subsuelo.

– Los cultivos son más susceptibles a tener plagas, producir menos nutrientes y resistir menos las sequías por el aumento de temperatura

– En México la Comisión Nacional del Agua (Conagua) emitió una alerta de sequía en varios estados del norte del país, lo que afecta la seguridad alimenticia en el mundo

– Incendios, como los recientes en Australia y el Amazonas, están directamente relacionados con el aumento de calor.

 

Estos desastres son provocados por el aumento de un grado de temperatura del planeta, desencadenado por las 152 millones de toneladas de contaminación que producimos CADA 24 HORAS. La mayor fuente de emisiones es la quema de combustibles fósiles que se genera por actividades diarias como el transporte terrestre y aéreo, minería de carbón, producción petrolera, quema de cultivos, agricultura industrial, quema de bosques, vertederos de basura y procesos industriales.

 

¿Qué podemos hacer?

 

Primero, informarte e informar a los demás sobre estos datos a través de redes sociales, unirte a manifestaciones o simplemente de hablar del tema con conocidos. Proponte como meta inspirar a al menos cinco personas. También usa tu voto y ejerce tu democracia estando al tanto de las políticas públicas del cambio climático y usa la información para tomar decisiones. Los estadounidenses, por ejemplo, deben tomar en cuenta la salida de su país del Acuerdo de París, que se ejecutará un día después de las elecciones presidenciales del 2020 en EEUU.

 

Toma decisiones inteligentes con base en la información que tienes. Pregúntate qué vas a comer, entonces puedes reducir tu consumo de carne, si puedes adquiere productos orgánicos y locales, compra luces LED y repiensa otros hábitos y decisiones de compra, por ejemplo, si piensas adquirir un automóvil y tienes la posibilidad, prefiere un modelo eléctrico o híbrido.

 

Invierte en energías renovables para tu hogar o empresa. Según Lever, la tecnología eólica y solar para producir energía eléctrica son de las inversiones más seguras que puedes hacer porque cada vez es más barata (0.25 dólares por Watt para la energía solar), y son recursos gratuitos y eficientes: si pudiéramos cosechar el viento en todo el mundo, se podría suministrar el consumo eléctrico del planeta más de 40 veces, mientras que el sol emite la energía solar necesaria para cubrir las necesidades energéticas por un año.   Así que después de recuperar el costo de inversión, que es en pocos años, lo demás son ganancias. Las bondades de estas tecnologías permiten a los países en desarrollo acceder a ellas y producir y consumir su propia energía. Un caso de éxito fue Chile, cuyo gobierno, sociedad civil y sector privado se unieron para subir su consumo de energía renovables a 16.67W en tres años. Lever subrayó que la inversión en estas tecnologías representa generación de empleo y crecimiento sostenido y seguro para nuestras economías.

 

Por esto y más, en Ashoka, como en The Climate Reality Project, creemos que todas las personas tienen la capacidad para mejorar su entorno y el potencial para responder a los problemas sociales más urgentes. No esperes más, investiga, inspira y activa a más personas como agentes de cambio para impulsar juntos soluciones climáticas.    

 

Escrito por Alicia Mendoza / @AliciaMendozaFe

 

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